Estructura del diamante |
De manera natural, el carbono se presenta es esencia de tres formas, como carbón, grafito o diamante. Analicemos las estructuras. El diamante es el más sencillo. Los carbonos se encuentran unidos unos a otros mediante enlaces covalentes simples, formando una estructura cristalina tetraédrica. Es esta estructura simétrica lo que otorga al diamante su extraordinaria dureza.
En cuanto al grafito, los carbonos se unen mediante enlaces covalentes simples formando una lámina de hexágonos. Estas láminas, a su vez, se encuentran unidas entre sí mediante enlaces más débiles, de manera que las láminas
se desprenden fácilmente. Por eso el grafito se utiliza como mina de lápiz, dada su capacidad para desprenderse.
Por otra parte, el carbón tiene una estructura bastante más complicada, basada en hexágonos de manera análoga a la del grafito aunque formando estructuras más complejas.
Por último, y a pesar de no aparecer en estado natural, cabe destacar la enorme dureza y resistencia, y la notable ligereza de la fibra de carbono, 5 veces más ligera que el aluminio. Es un compuesto amorfo formado por láminas de carbono situadas aleatoriamente entrecruzadas.
Esos son, por así decirlo, los alomorfos "clásicos", nada del otro mundo. En otro post hablaré de otros cuatro alomorfos con propiedades impresionantes, que revolucionaron y continuarán revolucionando el paradigma científico-técnico.
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